RELATORÍA DE LA SESIÓN “INOCUIDAD DE FRUTAS Y HORTALIZAS”

Resumen

En el caso colombiano, la zona andina fría, tiene una marcada vocación histórica hacia el tema hortofrutícola. No obstante, ello no ha conseguido traducirse en la consolidación de actividades productivas donde haya continuidad, consistencia, innovación y prosperidad. Las razones para explicarlo son complejas y de diversa índole, pero en forma abreviada se podría intentar agruparlas alrededor de dos aspectos fundamentales: Uno, de carácter “endógeno” que se resume en lo que se denominaría, imperfecciones del mercado: De un lado, bajos volúmenes de comercialización originados en circunstancias como  el bajísimo consumo per cápita de vegetales  en el país, de suyo, uno de los más reducidos de toda América latina. Pero que también se generan a partir de lo que podrían denominarse, posiciones dominantes,  ejercidas por  los actores más significativos en demanda dentro de un mercado “estrecho”, que nunca ha mirado para “afuera”, como por ejemplo, las centrales mayoristas y los almacenes de cadena. Y por último, aunque no menos importante, en hechos como la ausencia de mecanismos modernos de contratación que proporcionen seguridad y garantía de cumplimiento – contratos forward-, por lo cual los agricultores se ven permanentemente expuestos a condiciones inciertas, que afectan las cantidades tranzadas y sobretodo, los precios de referencia.  Hay igualmente,  un segundo grupo, (de tipo exógeno), más ligado a  elementos de macro entorno, como son aquellos que tienen que ver con los planes de ordenamiento territorial, las áreas protegidas, el proceso de urbanización creciente y desbordada en ciertas zonas, y las condiciones nacionales de seguridad y de orden público.